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Mostrando entradas de septiembre, 2019

CONTINUIDAD DEL ESFUERZO TORISTA EN RIAZA

La feria de 2019, que abre un nuevo ciclo de gestión de las corridas de toros y novilladas de la feria, representa, sin duda, una continuidad del esfuerzo hecho los últimos años por poner a Riaza en el mapa de la geografía taurina, gracias a la adecuada selección de ganaderías y toreros. Además de los interesantes encierros y las capeas populares y de las peñas, las corridas de toros y novilladas han estado marcadas por el denominador de la casta brava, que es la garantía de futuro para la supervivencia de la tauromaquia, sobre la que se ciernen tantas amenazas. Víctor Barrio y Joselito Adame a hombros de las peñas en 2015 La corrida de Valdellán, ganadería muy apreciada desde que lidió al bravo toro Navarro en Las Ventas, en el desafío ganadero con Saltillo en septiembre de 2018, y que ha refrendado su calidad con la corrida completa de San Isidro, así como la novillada de La Quinta, que es siempre una garantía de casta, mantienen la imagen de seriedad en la elección del

LA CASTA ES LA GARANTÍA DE FUTURO. LA CORRIDA DE PALHA EN ARLES DA UN GRAN ESPECTÁCULO

La corrida de Palha en Arles en la pasada Feria du Riz, en contraste con la festiva goyesca del día anterior, ilustra perfectamente la dicotomía en la que se mueven las corridas de toros en la actualidad. Una corrida seria de presentación, recorriendo todos los matices de la casta y nunca exenta de agresividad. Planteada como una corrida concurso en la ejecución de la suerte de varas, fijando un espacio a contraquerencia de toriles para el caballo y un gran óvalo truncado formado por la raya habitual de los picadores en cuyo interior se colocaba a los toros. Ningún toro defraudó en las 16 varas que tomaron con prontitud y codicia. Formoso-352 se arrancó tres veces desde larga distancia  al caballo de Francisco Romero, quien obtuvo el premio al mejor picador de la corrida Un toro bravísimo, Formoso-352, que después de acudir tres veces al caballo galopando y perseguir a los banderilleros, regaló no menos de 30 embestidas a un Pepe Moral que nunca le perdió la cara y se gus