Chapu Apaolaza, portavoz de la Fundación Toro de Lidia, transmite
serenidad, parece capaz de atravesar un incendio a paso pausado y haciendo una
evaluación de daños sobre la marcha. Brillante en sus argumentación, se
preocupa de buscar referencias académicas para justificar sus ideas. En
definitiva, da la impresión de ser el personaje ideal para su función: defender
la tauromaquia de los ataques sociales y políticos que por mor de los avatares
políticos, la moda o los intereses económicos de multinacionales de la
alimentación se ciernen sobre ella.
Chapu Apaolaza en la Tertulia de Jordán
Maneja con soltura la teoría de la Espiral del silencio de
Elisabeth Noelle-Neumann para explicar la pérdida de apoyos de la tauromaquia
en la sociedad, según la cual las opiniones mayoritarias en la sociedad van
silenciando y dejando sin adeptos a las minoritarias, y te ilustra con
referencias exóticas la trascendencia de los valores éticos de la corrida de
toros, como en sus curiosas explicaciones a tribus africanas de videos de José
Tomás, en las cuales escuchaba repetidamente la frase en swahili que da título
a este artículo: mtu mwenye mayai makubwa,
cuya traducción aproximada es “Que huevos más grandes tiene ese hombre”.
Defiende la tauromaquia con rigor en la argumentación
Desglosa la base de su argumentación contra los antitaurinos,
que básicamente consiste en defender que el hombre se sirve de los animales de
diferentes manera, entre ellas la de la alimentación de la que participamos
todos y, por lo que atacar al sacrificio del animal en la corrida nos equipara
a todos los humanos en el disfrute de la utilidad de los animales y que si recurren diciendo que se hace un espectáculo
de ello, responde que quien tiene la autoridad moral para reprimir las
costumbres, culturas y usos de los demás, siempre que no atenten contra los
derechos humanos.
Como periodista ha recorrido diversas partes del mundo
en las que ha explicado la corrida de toros
Posee una capacidad notable de explicación y persuasión
y un conocimiento taurino con tradición familiar. Su padre, Paco Apaolaza,
fue el crítico taurino del grupo El Correo-Edica en los años 90, integrista que
entendía la crítica como la capacidad de orientar el conocimiento de sus
lectores y el establecimiento de normas para interpretar el toreo. Su tío
Huberto fue un caso curioso de paulista guipuzcoano, una tierra que ha
disfrutado poco del toreo de arte y Chapu sigue la tradición familiar como
corredor de encierros y aficionado a los toros lo que le permite moverse con
soltura en dos ambientes taurinos, que en realidad son diferentes, aunque no
contradictorios.
Enamorado del encierro de Pamplona
sobre el que ha publicado el libro 7 de julio
Es la cara exterior de la FTL de la que insiste que no entra
en el interior de la tauromaquia, pues lo que trata es de defender su
pervivencia en la sociedad para que los habituales movimientos pendulares que sufre
en su aceptación social, no sean cortados por decisiones ajenas al espectáculo.
Cree que artículos como el del escritor Sergio del Molino, defienden la
tauromaquia frente a los ataques antitaurinos, con mayor eficacia que muchos
taurinos.
Chapu Apaolaza en la Cuesta de Santo Domingo este 11 de julio
Estima que en la FTL hay un lugar para los aficionados y no
solo para los profesionales y que ese lugar será más relevante cuanto mayor sea
el número de aficionados que participen. No obstante su entusiasta discurso, no
logra obviar que la FTL tiene que mejorar su funcionamiento y su capacidad de
atracción hacia dentro y hacia fuera de la tauromaquia, convertirse en elemento
de referencia para los poderes públicos, los partidos políticos y los medios de
comunicación, deficiencias que atribuye, en caso de existir, a problemas de
financiación.
Inauguración del capítulo de la FTL en Málaga
Una interesante conversación en la que no falto una referencia
a su paso por el Canal Toros y la actual Telemadrid, para los que resume sus
diferencias en la existencia de aquellos que hacen un discurso para el público
y los que lo hacen para los que mandan, por otra parte extrapolable a todos los
sectores periodísticos, no sólo taurinos.
Defiende el respeto al espectador en las corridas televisadas
La agradable conversación empezó con un cariñoso recuerdo a
Paco Ureña, quien fue invitado de la Tertulia de Jordán en 2016 y que está
pasando por un doloroso trance del que deseamos se recupere lo mejor posible.
Fotos de la Tertulia de Andrew Moore
Fotos de la Tertulia de Andrew Moore
Es una persona interesante de oirla argumentar
ResponderEliminarSe aprende mucho