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TOREAR DESPACIO ES UN MILAGRO. CURRO DÍAZ EN LA TERTULIA DE JORDÁN


Curro Díaz vino sin compañía a la Tertulia de Jordán, sin jefe de prensa, sin apoderado o mozo de espadas que le formen séquito. Tiene claro lo que dice y facilidad para decirlo.
Curro Díaz en la Tertulia de Jordán
 
Está en un momento dulce de su carrera, que se reconoce más en Madrid que en Sevilla. Torero de gusto, de dejarse ir en los muletazos que da a toros de ganaderías encastadas. Su toreo es profundo y eso hace que no fluya con tanta facilidad como en caso de otros toreros de más fácil digestión por los públicos, pero está satisfecho con su cartel entre los aficionados que son los que crean ambiente cuando se anuncia en las corridas. Al ser un torero de pellizco dice que los gitanos se lo quieren apropiar, aunque sólo tiene un cuarterón de sangre gitana por su abuela paterna.
 
En el homenaje a Victorino en Vistalegre
con relajo, compostura y la suerte cargada
 
Estaba contento de su actuación en Vistalegre con los victorinos el sábado 17 de febrero y se entretuvo en comentar la faena al cuarto toro vista desde el ruedo, tan diferente a como se ve desde los tendidos. Es siempre muy interesante ver una faena desde el punto de vista del torero, sin olvidarse de que además de las vicisitudes del protagonista, la corrida de toros es un espectáculo que se valora desde el tendido.

Transmite entusiasmo en la conversación
 
Ha vivido muy de cerca las últimas tragedias de los toros, pues formaba cartel con Víctor Barrio el día de su mortal cogida en Teruel y tiene muy presente a Iván Fandiño, con quien le unía una buena amistad y cuyo nombre puso a su hijo que nació apenas seis semanas más tarde de su muerte en Aire-sur-l’Adour.
Los artísticos remates por bajo de Curro Díaz
 
El mundo de los toros es como es, dice sentencioso comentando el revuelo que ha levantado el libro de Nestor García sobre Fandiño. Estar con un apoderado independiente tiene  muchas complicaciones, bien lo sabe él que está con Joxin Iriarte, empresario de Azpeitia que es más un aficionado que un taurino o más bien un apoderado más tipo Pineda, el apoderado de Joselito El Gallo, que era un buen gestor, que Camará, quien hizo y deshizo en el mundo del toro a través del apoderamiento de Manolete. “Este es un mundo complicado y lo mejor para navegar por él es tener confianza en la honradez de tu apoderado”.

Curro Díaz se arranca en la conversación
para mostrar las formas del toreo
Para torear despacio primero hay que sentirlo, dice, lo que abre una larga conversación sobre la pureza en el toreo y la importancia del temple, de la colocación, del remate o del clasicismo, que como casi siempre nos permite divagar sobre nuestras apetencias que suelen ser más entendibles sin el toro delante. El toro es siempre la piedra de toque del toreo y todos, incluso el matador, manifestamos nuestra preferencia por la variedad de encastes y comportamientos y como nos gustaría que los primeros espadas torearan con naturalidad toros de un abanico más amplio de hierros y encastes.
Geometría del toreo.
Verticalidad del torero llevando la horizontalidad del toro
 
Se habla fácil con Curro Díaz pues tiene un criterio entendible por aficionados y es un gran conversador. Transmite entusiasmo tanto cuando habla del toreo como cuando habla de su familia y le gusta ser reconocido como torero incluso en la calle.
Curro Díaz con José Fuentes
en el homenaje por sus 50 años de alternativa
 
Pertenece a la generación de los toreros que aprenden en las escuelas de tauromaquia, pero él aprendió a la manera antigua, con un matador de toros, José Fuentes el torero de Linares, aquél para quien inventó El Pipo, siempre genial, el slogan “Linares nos lo quitó, Linares nos lo devuelve” haciendo un guiño a la muerte de Manolete. Habla con respeto y cariño de Fuentes que está prácticamente olvidado por el mundo taurino, pero que atesora una gran  experiencia y capacidad de transmitirla.
Firmando un recuerdo para la Tertulia de Jordán
 
Con una actitud vitalista, defiende el toreo que es su vida, no se queja de las dificultades pasadas en sus inicios y prefiere mirar hacia adelante, lejos, pues sabe que tiene un gran porvenir.
 
Fotografías de Andrew Moore

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