La entrada sobre la magnífica foto de Andrew Moore hizo la nº
200 del blog. Los números redondos tienen un cierto atractivo para la
conmemoración, para la recapitulación, para el recuerdo, también para la
nostalgia.
La célebre foto de Andrew Moore,
de la asistencia al novillero Pablo Aguado
el 26 de marzo de 2017
Ya sé que no tiene mayor importancia, ni mucho menos
trascendencia, el haber publicado 200 opiniones taurinas en un blog que recibe
unos cuantos cientos de visitas para cada entrada, unos pocos miles en casos
muy señalados, pero no puedo, ni quiero, reprimir un cierto sentimiento de alegría por haberlo hecho.
Los amigos del toro o la parte sana de la afición.
Andrés Martínez de León relataba, con buen humor,
los males endémicos de la fiesta (y su remedio) en 1954
Las entradas son reflejo de mis sentimientos hacia la fiesta
de los toros, la parte de la tauromaquia que me interesa. No enseño nada, no
defino nada, ni lo que está bien ni lo que está mal. Como en tantas cosas en
este momento de mi vida, no hablo de lo que no me gusta, simplemente procuro
alejarme de ello. Comento lo que me gusta, lo que me produce sentimientos
positivos, lo que me alegra.
Antonio Chenel, Antoñete forjó una manera de entender
los toros a mi generación
Los matadores Ruiz Miguel, Luis Francisco Esplá y José Luis Palomar
a hombros en Las Ventas junto a Victorino el 1 de junio de 1982,
en la corrida del siglo.
Ese día nos hartamos a gritar de alegría "Esta es la fiesta"
No creo haber relatado no ya una corrida completa, sino ni
siquiera una faena. Difícilmente se encuentra una mención a un presidente o un
cómputo de orejas cortadas. Raramente comento los pases o lances de nombres
complicados, pues no conozco bien los nombres y me cuesta saber lo que es una
brionesa o una orticina. Sin embargo, sí me gusta señalar cuando veo un hecho
de extraordinario valor, belleza, dignidad o amor por el toreo.
Pancarta de aficionados mexicanos en la plaza
El Toreo de la Condesa. México D.F. (1944)
Procuro no utilizar referencias a un “antes” mítico, que
muchas veces sólo existe en la cabeza del que lo refiere, sino usar referencias
concretas. Ese “antes” tiene siempre referencias cruzadas y muchas veces sólo
indica la sorpresa del narrador de ver o entender algo por primera vez, cuando
no la búsqueda de la justificación para apoyar sus ideas. Hacemos referencia
tantas veces al pasado para justificar o denostar el presente.
Agitador-184 de Fuente Ymbro picado por
Pedro Iturralde el 9 de mayo de 2015.
Foto de Andrew Moore
Agitador-184 en el campo
He vivido los cambios de los últimos 35 años de toreo, que ya
son muchos. He visto al toreo ponerse de perfil, a los toros embestir con mayor
frecuencia y docilidad. El auge de pases demagógicos como las manoletinas, la
proliferación de lances de capote y el alargamiento de faenas que sólo tienen
sentido porque ni molestan al toro, ni el toro molesta al matador. Atiendo con
interés los intentos de valoración, no de recuperación pues nunca la conocí
bien hecha ni valorada, de la suerte de varas.
José Gómez Ortega "Gallito"
La gracia toreadora, según la poética definición de Rafael Alberti,
en la puerta del Hotel Castilla de Toledo, junto al industrial Carlos Pickman
y su mozo de espadas "Caracol".
Esta foto, de Baldomero, se ha venido indicando erróneamente como realizada
en el domicilio de Joselito en la calle Arrieta de Madrid
Miro con envidia a Francia por
su entusiasmo y rigor en la defensa de la corrida de toros, tantas veces
sustituida en España por apelaciones vacías a la tradición o la costumbre.
También miro con preocupación el futuro inmediato debido a la formación de una
corriente animalista que permea la sociedad y ve en las corridas de toros un
enemigo fácil de batir, especialmente por la falta de reacción de los
estamentos que generan el negocio y viven de él.
Paseíllo en Arles el 25 de abril de 2011
Foto de Eduardo de la Cruz, con quien coincidí en la plaza
Apunte Publicado en Opinión y Toros
Como en tantas actividades seguidas con fruición por un sector
social muy minoritario, la tauromaquia tiene poco que ofrecer socialmente. Hay
poco dinero, escasa influencia social, prácticamente nula relevancia cultural,
cuando no hay un rechazo social, todo esto hace que resulte difícil fijar una
posición, generalmente aceptada, acerca de cómo son y cómo deben ser las
corridas de toros, lo que generaría una opinión mayoritaria que silenciaría las
minorías. Su ausencia deja hueco para numerosas voces que compiten en proclamar
su particular visión.
Víctor Barrio y Joselito Adame salen a hombros
en la plaza de toros de Riaza el 19 de septiembre de 2015.
Era la primera vez que yo estaba de asesor del presidente de un festejo
Dentro de este fascinante guirigay, expongo en pocas frases lo
que siento o disfruto cuando me acerco a una corrida de toros o a una actividad
relacionada con la tauromaquia. Sin pretensión de juzgar, sino sólo de mostrar
lo que me ha resultado interesante por novedoso o singular, intentando huir de
lugares comunes a la hora de contar, igual que lo intento en el momento de
sentir.
Tras la agresión de los antitaurinos en el
Aula de Tauromaquia del CEU el 4 de diciembre de 2014.
Ahora estoy esperando la apertura de juicio oral
tras las brillantes gestiones de José Ramón García
La emoción, de sobra lo sabemos, es una trampa. En busca de ella recorremos ferias, buscamos ganaderías, seguimos a toreros, aunque sabemos también que la emoción tiene que ver con la novedad, con lo inesperado. Hay que acostumbrar mucho a la mirada, para alcanzar una emoción que podríamos llamar de calidad, que no se quede en un simple chirriar de los sentidos ante una provocación.
César rincón con Bastonito, el 7 de junio de 1994, en la más épica faena
de la historia de la plaza de toros de Las Ventas
Columna publicada el 8 de junio de 1994 en DIARIO 16
sobre la faena de César Rincón a Bastonito
La cercanía de esa emoción, la manera como me haya sacudido, es lo que intento narrar en mis apuntes, sabiendo que no soy el mismo después de esa emoción, que la he interiorizado y que me ha cambiado. Por eso lo cuento, para compartir con quien lo quiera esos instantes de felicidad. Y eso lo he hecho durante 200 veces en los últimos tres años.
Los amigos a la salida de Las Ventas
Foto publicitaria del torero canario José Mata,
muerto tras la la cogida por el toro Cascabel-128 de Luis Frías Piqueras
el 25 de julio de 1971 en Villanueva de los Infantes, Ciudad Real.
Foto encontrada en la pared del Bar Otero de Madrid en 2013.
El matador de toros Paco Ureña,
se muestra reflexivo en la Tertulia de Jordán
Foto de Andrew Moore
Frente a Las Ventas a la salida de los toros
Foto de Antonio L. Serrano
Enhorabuena, Andrés. Vamos por los 2.000! Nacho Barquero (fiel lector).
ResponderEliminarMuchas gracias querido Nacho por tus ánimos para que os siga dando la lata. Un abrazo
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