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DILES QUE NO ME OLVIDEN. TRAS LAS HUELLAS DE JOSE MATA. 3.3 LA TRAGEDIA

3.3 LA TRAGEDIA

La cogida, gravísima, desbordó la capacidad de intervención de la enfermería y el equipo médico de la plaza. La enfermería preparada en el Santuario suscitó muchas discusiones tras la cogida, debiendo aclararlas el Gobierno Civil de Ciudad Real que afirmó que  la visita de inspección había certificado su idoneidad. También el Colegio de Médicos de Ciudad Real afirmó que las condiciones de la enfermería y la actuación de los médicos fueron las idóneas. 


Nota del Gobierno Civil de Ciudad Real
certificando la idoneidad de la enfermería de la 
Plaza de toros de Villanueva de los Infantes
Diario Lanza 28 de julio de 1971

Pero lo cierto es que nadie suturó la femoral a José Mata tras la cornada y con un torniquete hecho sobre la propia taleguilla lo mandaron a Madrid en un domingo de verano por la carretera N-IV del llamado Plan Redia, la carretera de Andalucía anterior a las autopistas, en medio del atasco tremendo de un país que en los años 60 del llamado milagro español, había vendido muchos coches pero no había invertido en carreteras.


Estado en el que llegó José Mata al Sanatorio de Toreros
El Ruedo de 27 de julio de 1971

No hay épica en su muerte, es una mala cogida en una corrida perdida de un pueblo, Villanueva de los Infantes, alejado de las principales vías de comunicación y conocido por ser el lugar donde falleció Francisco de Quevedo, en un duro destierro fuera de la Corte y sus intrigas. Era una corrida más de una temporada donde se superó la cantidad de seiscientas corridas de toros. Fue en la corrida en la que se cebó la tragedia.


Fotocrónica de la cogida en El Ruedo de 3 de agosto de 1971

La muerte de Mata impresionó mucho, por una parte era la primera que se producía tras la muerte de Manolete casi 25 años antes, por otra parte parecía razonablemente evitable. Los avances en cirugía y el acceso a la penicilina habían acabado prácticamente con la mortandad de los toreros, las cogidas se curaban sin esperar con temor a la aparición de la infección causante de tantas muertes. La lidia habitual de utreros como toros disminuía también los riesgos, que nunca desaparecen en una corrida, sean utreros o cuatreños. Claro que los toreros ejercían y ejercen una profesión de riesgo, pero este se suponía más medido de lo que el infausto viaje de Mata por las carreteras españolas demostró.


ABC 27 de julio de 1971

Si el recuerdo remitía a Manolete, las circunstancias recordaban a Sánchez Mejías, con la cornada en la ingle que rompe la femoral, la enfermería insuficientemente equipada, el largo traslado en ambulancia por las carreteras secundarias hasta Madrid, y la evitable gangrena que acaba con su vida, muestran un paralelismo con la imagen de Sánchez Mejías recorriendo la misma carretera para morir desangrado y con gangrena en la clínica del doctor Crespo en la calle Goya de Madrid, esquina a la Ronda de Francisco Silvela, a pesar de que el médico local de Manzanares, Fidel Cascón Arroyo se ofreció para curarle en la misma enfermería de la plaza. 



Tomado de Noticias de Infantes

Nadie se ofreció para curar a Mata en su trágico viaje hasta el Sanatorio de toreros en Madrid, al que llegó cuando la gangrena ya había aparecido.


Diario Lanza 28 de julio de 1971

Tras el largo viaje en ambulancia, la situación médica de Mata, cuando llegó al Sanatorio de toreros era crítica y Mata rodeado de su mujer, sus padres y su hermana Nery, quienes vinieron de urgencia desde La Palma, falleció el 27 de julio, dos días después de la cornada que resultó mortal, a pesar de los esfuerzos de los médicos que le trataron.



La salida del cortejo fúnebre del Sanatorio de Toreros,
camino de Las Ventas donde recorrería su exterior
Diario Lanza 31 de julio de 1971

Su muerte no fue cantada por un gran poeta como en el caso de Sánchez Mejías, pero el relato de su agonía y fallecimiento llenó las páginas de la prensa de la época. El diario ABC seguirá con detalle las actuaciones médicas, prestando atención a las circunstancias personales y familiares, la revista El Ruedo dedicará un número extraordinario a la muerte del torero. 


Portada de el nº extraordinario de El Ruedo de 3 de agosto de 1971
dedicado a la muerte de José Mata


Una revista tan poco taurina como La Gaceta Ilustrada publicará un reportaje de cuatro páginas titulado “La muerte de un torero”, donde afirmará: “Un torero modesto y valiente ha dejado su vida en el ruedo: muchos opinan que nunca debió morir”. 




Reportaje en La Gaceta Ilustrada sobre la muerte de José Mata



La polémica por las condiciones de la enfermería de la plaza y la atención médica, tendrá acusaciones y responsabilidades cruzadas, en las que intervendrán el Gobierno Civil y el Colegio de Médicos de Ciudad Real y la polémica  resonará durante mucho tiempo, tanto que el crítico del diario El País, Joaquín Vidal, la traerá a colación tras la muerte de Paquirri, trece años después, debido a la cogida sufrida en Pozoblanco. “… aún no se sabe de un apoderado que haya negado la actuación de su torero porque la enfermería no estaba en condiciones”, dirá Joaquín Vidal tras la muerte de Paquirri, que tantas similitudes tendrá con la de José Mata, en un artículo subtitulado: “Las enfermerías de paredes desconchadas son frecuentes en los 5.000 festejos anuales”. Finalmente la esposa de Mata, Marie France Goudard dirá en una entrevista a Manuel Molés en el diario Pueblo: “No acuso a nadie. Todos hicieron lo posible por salvar su vida”.


Diario Lanza 30 de julio de 1971.
Reproduce una entrevista de Manuel Molés a Marie- France Goudard en el diario Pueblo


José Mata recibió más atención de la prensa en esos días de la que posiblemente recabó a lo largo de toda su carrera, pero fue el tributo de la siempre sorprendente muerte de un torero, la impresionante tragedia que rodea a la fiesta de los toros, agravada por la mala suerte, la supuesta imprevisión de los recursos médicos, el cariño a un torero que estaba despuntando en Madrid, la sorpresa de su origen canario, la vida segada de un valiente que se estaba abriendo un improbable paso en el mundo de los toros.

(Cont.)
Próximo capítulo: 4. NO HAY OLVIDO PARA LOS HEROES. 4.1 UNA HISTORIA CONMOVEDORA.

Publicado anteriormente
2.3 La alternativa. http://adiosmadridtoros.blogspot.com.es/2014/12/diles-que-no-me-olviden-tras-las.html

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